By La región de Valparaíso, es la segunda zona productora de uva de mesa de exportación del país después del Maule, y a diferencia de otras regiones, los Valles de Aconcagua son los más afectados por la sequía. Por eso, al alero del Programa Estratégico de Fruticultura Sustentable, Uvanova en conjunto con la Municipalidad de Santa María, organizaron un Seminario Técnico en el cual compartieron con los agricultores estrategias de mitigación para sacar adelante la producción de esta temporada.
A salón lleno se inició el encuentro encabezado por el alcalde Claudio Zurita; Carolina Cruz, gerente de Uvanova y Kurt Neuling, gerente del Programa Fruticultura Sustentable, en el que participaron como relatores Gabriel Sellés, coordinador del Programa Nacional de Hortofrutcultura del INIA; Arturo Miquel, asesor independiente experto en uva de mesa; Vicente Valdivieso, agrónomo y miembro de Uvanova; y Felipe Bonelli, gerente de Viticultura & Fruticultura Asoc.
“Nos tenemos que enfocar en esta región que es la que está más compleja” y que concentra “más del 80% de los parronales en la primera sección del Río Aconcagua. (…) La crisis hídrica nos obliga a todos, grandes, medianos y pequeños productores, a alinearnos para salir adelante con buena fruta, en calidad y condición, que sea competitiva, por lo tanto si no tomamos las medidas correctivas nos irá mal. Si queremos seguir siendo los primeros en exportar uva de mesa al mundo tenemos que ser capaces de sortear esta coyuntura”, sostuvo Carolina Cruz, gerente de Uvanova.
Kurt Neuling, gerente del PER Fruticultura Sustentable señaló que el objetivo del programa es apoyar a los agricultores, a través de instancias como este seminario, entregándoles herramientas técnicas para una gestión eficiente del riego, especialmente en condiciones de sequía, que favorezcan tanto el desarrollo sustentable de sus predios como su rentabilidad comercial.
PRINCIPALES MEDIDAS
Gabriel Sellés, investigador del INIA especialista en riego, recomendó “hacer un balance hídrico del predio para determinar la magnitud del daño y tomar decisiones en cuanto a si es conveniente regar todo con menos agua, o dejar sin regar algunos sectores para darle preferencia a las variedades con más expectativas comerciales.”
Junto con ello, propuso el uso de mallas de cobertura, con lo cual “se reduce hasta en 34% el consumo de agua de la planta” y también para el sombreamiento de acequias, con el fin de evitar la evapotranspiración causada por la radiación solar y el viento; hacer mejoras en el riego por surcos y si es por goteo mediante limpieza de filtros, además de controlar las malezas para que no consuman las reservas de agua, entre otras acciones para evitar pérdidas de agua.
Sellés agregó que “para tener una fruticultura sustentable es necesario seguir avanzando en tecnificación de riego, ya que menos del 45% de los agricultores cuenta con esta tecnología” por lo cual llamó a las asociaciones de agricultores a postular a través de la CNR a financiamiento para obras de riego y sistemas de tecnificación intrapredial.
Por su parte, Arturo Miquel recomendó a los productores de uva de mesa como medidas de mitigación el ajuste de poda en verde a una menor carga, el uso de geles líquidos retenedores de agua en el riego, así como el empleo de tumbas de guano, ya que cumplen la misma función al retener la humedad.
