Una familia de Santa María vivió una experiencia aterradora el pasado 24 de octubre, alrededor de las 21:00 horas, cuando cuatro sujetos armados y encapuchados irrumpieron en su hogar. Según testimonios entregados a nuestro medio, los delincuentes sometieron a los integrantes del hogar bajo amenazas de muerte, apuntándoles con armas de fuego equipadas con láser.
La afectada, quien se encontraba haciendo dormir a su bebé, relató la angustiante situación: “Empecé a escuchar muchos ruidos. Hoy tengo tres hijos y, de repente, me voy parando porque era mucho el ruido. Al entrar a la pieza, me apuntan y solo le pedí que a mis guaguas no les hicieran nada, que me pasaran a mis otros hijos. Pero a todos nos tenían apuntados con armas, después nos amarraron. Hasta mis hijos chicos los amarraron”, comentó visiblemente afectada.
La violencia del asalto no solo afectó a los adultos, sino también a los menores. “Nos dijeron que no los miráramos a la cara y que no llamáramos a nadie, porque podían volver”, agregó. La víctima, quien se mudó a Santa María desde Santiago buscando una vida más tranquila, expresó su desazón: “Imagínate que veníamos para acá para poder estar más tranquilos y vivimos esto, es horrible. A mi mamá también la pidieron afuera, y a mi hermano también lo amarraron”.
El asalto culminó con el robo de dos vehículos y diversas especies del hogar, generando pérdidas avaluadas en 52 millones de pesos. La comunidad de Santa María se encuentra alarmada ante estos hechos de violencia y solicita que las autoridades intensifiquen la seguridad en la zona.