La diputada por el Distrito 6, Francisca Bello, realizó un positivo balance de su gestión legislativa y territorial en materia de derecho humano al agua, destacando los avances impulsados a favor de los sistemas de Agua Potable Rural (APR) y de las comunidades que sufren las consecuencias de la crisis hídrica en la región.
“Desde el inicio de mi mandato he puesto como prioridad el resguardo del agua para las personas y no para el negocio. El fortalecimiento de las APR y la consagración del agua como un derecho humano ha guiado nuestra labor legislativa y territorial, porque en el Aconcagua y en tantas comunas del Distrito 6 el agua significa vida”, afirmó la parlamentaria.
Entre los logros más relevantes está la aprobación de leyes que rebajan las tarifas eléctricas para los APR, la eliminación del cobro en horas punta y la participación garantizada de estas organizaciones en directorios de usuarios de agua. Asimismo, Bello impulsó modificaciones al Código de Aguas que permiten un trato más justo para pequeños agricultores y comunidades rurales frente a los grandes acaparadores del recurso.
En concreto, gestionó el recambio de filtros para el APR La Victoria, apoyó a La Palma y Guzmanes de Putaendo, realizó gestiones para el financiamiento del APR del Algarrobal, concretó instancias para resolver dudas y problemas entre Esval y la Unión Comunal de La Ligua, además de la extensión del decreto de escasez hídrica en Petorca, lo que permitió enviar recursos y apoyos a agricultores afectados por la sequía.
Con un balance que combina gestión legislativa y trabajo territorial, la diputada reafirmó su compromiso de seguir defendiendo el agua como un derecho humano esencial de cara a la reelección. “Nuestra tarea aún no termina. Queremos seguir trabajando junto a las comunidades para que ningún vecino o vecina de nuestro distrito vea vulnerado su derecho a acceder al agua potable y al saneamiento. El agua es vida y no puede ser un privilegio”, concluyó.