By Directora de Psicología de la Universidad de Aconcagua entrega 5 consejos
La popular frase “se apareció marzo”, surgida en un comercial de televisión, refleja fielmente los fantasmas que trae consigo el tercer mes del año para gran mayoría de las familias de nuestro país, las que, tras el paréntesis del verano, terminados los paseos y festivales, deben enfrentar la vuelta a la cotidianidad.
Lo anterior, no es solamente un tema económico, ya que, además de los mayores gastos de dicho mes, los padres con hijos en edad escolar deben lidiar con la ansiedad y el estrés que a estos les provoca la vuelta a clases, a quienes deben encauzar a retomar el ritmo propio del año escolar, dejando atrás el relajo del verano.
Dicha tarea no es para nada sencilla, por lo que resulta oportuno tener en cuenta los consejos de los expertos e implementar paulatinamente algunos cambios en la rutina diaria, de manera de hacer menos brusco este proceso.
En tal sentido, la psicóloga Denisse González Rozas, quien es directora de la Escuela de Psicología de la Universidad de Aconcagua, entregó algunas recomendaciones o “tips” para tener presentes.
“La vuelta a clases es un tema que cada vez se torna más complejo en nuestra sociedad, en especial por la gran cantidad de estímulos que tienen niños, niñas y jóvenes. Por otra parte, hay que entender que llevan más de dos meses alejados de sus escuelas, colegios y liceos, por lo que se debe procurar hacer un tránsito lo menos violento posible hacia la habitualidad del año”, señaló la profesional, quien enumeró sus 5 principales recomendaciones:
- Instaurar rutinas de higienización del sueño, por medio de horarios concretos para dormir y comenzar el día más temprano de que lo habitualmente ocurre en vacaciones.
- Promover la producción de melatonina por medio de rutinas como ducha relajante, cortinas para oscurecer la habitación y ejercicios de respiración antes de dormir.
- Dejar de usar pantallas tecnológicas, al menos dos horas antes de dormir.
- Desarrollar diálogos en familia, en donde recuerden actividades de las vacaciones, motivando así la vuelta a clases para compartir esas vivencias con los compañeros de curso.
- Mantener la calma como padres. Si transmitimos tranquilidad frente a la vuelta a clases, los niños, niñas y jóvenes sentirán mayor seguridad en el proceso adaptativo.
“En definitiva se trata de instalar una disciplina al interior del hogar, a partir del ejemplo y la convicción”, agregó la psicóloga y académica, quien concluyó señalando que, “En la Universidad de Aconcagua contamos con el CAPSI (Centro de Atención Psicológica Integral), a través del cual desarrollamos talleres y trabajo con las comunidades locales de Calama, San Felipe, Rancagua y Ancud, ciudades en donde dictamos la carrera de Psicología, y gracias a lo cual, procuramos ayudar en estas y otras materias a nuestros vecinos”.
