By Director regional de Gendarmería informó que se incrementarán estos procedimientos en los días previos a Navidad y Año Nuevo.
Personal del Complejo Penitenciario de Valparaíso y del Centro de Cumplimiento Penitenciario de San Felipe participaron en un registro y allanamiento simultáneo realizado durante la presente semana. El procedimiento permitió incautar una serie de elementos prohibidos por la administración penitenciaria.
En la oportunidad se revisaron módulos y colectivos que son habitados por 493 privados de libertad y participaron funcionarios de las mismas unidades, a los que se sumó contingente de la Unidad de Servicios Especiales Penitenciarios de Valparaíso y Quillota y Equipo de Canes Adiestrados. De esta manera, 110 uniformados intervinieron las unidades penales con la finalidad de prevenir posibles delitos al interior de los recintos.
El director regional de Gendarmería, coronel José Luis Meza Guajardo, sostuvo que “se realizaron allanamientos simultáneos en el Complejo Penitenciario de Valparaíso y en el CCP de San Felipe. El personal, en forma profesional efectuó los registros y allanamientos a las dependencias de los internos, llámese patios, baños, dormitorios, pasillos, talleres. Se encontró una gran cantidad de elementos prohibidos, entre ellos armas blancas hechizas, droga, teléfonos celulares”.
En total se incautaron: cinco envoltorios con diversos tipos de drogas, 14 teléfonos celulares, 22 armas blancas de fabricación artesanal, diez cargadores de aparatos electrónicos, ocho cables USB, cuatro perfumes, nueve audífonos, etc.
FIN DE AÑO
Tal como ocurre en las jornadas previas a las Fiestas Patrias, Gendarmería intensifica la realización de estos procedimientos los días o semanas previas a Navidad y Año Nuevo.
Respecto a este tema el coronel Meza afirmó que “Vamos a incrementar los registros y allanamientos por el tema de las fiestas de fiestas de fin de año, lo que es Navidad y Año Nuevo. La población penal, en estas fechas, hacen, por lo general, licor artesanal y provocan desordenes. La idea es prevenir para evitar situaciones de conflicto que pongan en riesgo la propia seguridad de ellos, de sus compañeros de reclusión o del personal”.
Dichas acciones se llevarán a cabo en cada una de las unidades del subsistema cerrado y se vendrán a sumar a las ya programadas.
