Sebastián Piñera, un legado que nos compromete con Chile y su gente Por Edith Quiroz Ortiz, Consejera Regional y Primera vicepresidente Regional de Renovación Nacional.
Hoy, 6 de marzo de 2023, se cumple el primer mes del fallecimiento inesperado de nuestro expresidente Sebastián Piñera, con quien tuve el honor de trabajar entre los años 2010 y 2014.
Con el paso de los días han venido a mi memoria una serie de recuerdos de lo que significó poder servir a Chile, pero especialmente a mi tierra y su gente, durante aquel tiempo, período que, con el paso de los años, se ha revalorizado y puesto paulatinamente en su lugar.
Sebastián Piñera fue un hombre absolutamente eficaz y eficiente en el manejo del Estado, de hecho, una de las reminiscencias que llegan a mi memoria, dice relación con aquellas reuniones bilaterales a las que nos citaba con cierta periodicidad para evaluar directamente nuestro trabajo. Había que llegar absolutamente preparados para esa instancia, pues él, como era su característica, estaba al tanto de todo desde antes que pudiéramos empezar a entregar nuestros informes. Esa capacidad y la consigna de inspirarnos a todos a ser especialmente eficientes en el desarrollo de nuestra tarea, por cuanto las necesidades de la gente así lo ameritaban, eran parte del sello que nos legó como funcionarios y colaboradores.
Fue en medio de esas reuniones, así como con la comunicación directa con su equipo de trabajo, en que nacieron grandes proyectos para la provincia de Los Andes, donde tuve el honor y privilegio, de ser la primera mujer que se nombró para ocupar el cargo de Gobernadora. Entre estas iniciativas, durante su primer gobierno se gestó el edificio del actual Complejo Fronterizo Los Libertadores, que, por cierto, se inauguró en septiembre de 2019; buscando levantar un lugar que brindara mejores condiciones de trabajo a funcionarios de los servicios y otras reparticiones del Estado, así como también a los usuarios que lo utilizan en sus viajes, por diferentes circunstancias, entre ambos países. El presidente Piñera estaba totalmente convencido de lo necesario que era este proyecto, más aún, en el gran desafío de profundizar lazos con Argentina y otros países del cono sur. Siguiendo el camino de la conectividad, logramos en la primera administración, los recursos para mejorar la Cuesta Chacabuco, y durante el segundo gobierno, también, comenzaron los estudios para un segundo túnel que una a nuestras comunas con la región metropolitana, el que hoy está en consulta ciudadana. De igual forma, el presidente Piñera puso atención cada vez que le hablamos del proyecto de conectividad entre Los Andes y San Esteban, que se traducía en la construcción de un segundo puente. De hecho, aunque hoy algunos quieran ocultarlo, fue durante su gestión que este proyecto comenzó a ser tratado por las autoridades del poder central como algo prioritario.
En materia de salud, se construyeron durante los gobiernos del presidente Piñera, el Cesfam Cordillera Andina y el Centenario de Los Andes, este último, inaugurado once días después de terminada la primera gestión, porque si bien habría sido un hito político irnos del gobierno con esta obra inaugurada por nosotros, en realidad se habría transformado en una irresponsabilidad darnos el gusto, puesto que estábamos ante un centro de salud al que todavía le restaban equipos por instalar. De hecho, siguiendo el llamado de hacer las cosas de la mejor manera, en nuestra decisión nos dejamos guiar por el sentido común y la voluntad del buen y transparente servicio a los vecinos. En la trayectoria de acercarnos con el Estado a las comunidades, durante su último período en La Moneda, donde yo ya me desempeñaba como Consejera Regional, colocamos las primeras piedras de los nuevos -y próximos a inaugurar- Cesfam de Rinconada de Los Andes y de San Esteban.
En tiempos en que la seguridad pública se ha vuelto una necesidad imperiosa de los ciudadanos, durante el primer gobierno del presidente Sebastián Piñera, se hicieron los iniciales lineamientos del nuevo cuartel de la Prefectura PDI en Los Andes. De hecho, fue durante la segunda administración en que llamamos al concurso público para su licitación, y a mediados del presente año 2024, será inaugurado. Si bien, al presidente le encantaba la celeridad en los procesos y proyectos, también es cierto que se encontró con, pandemia de por medio, un Estado enorme y lento para muchas cosas, entre ellas, para elaborar, estudiar, licitar y construir un megaproyecto de tan alto impacto positivo para la comunidad.
Pero la huella que nos dejó el presidente Sebastián Piñera va más allá de las obras y proyectos, y traspasa hasta la parte humana y legado político. Como actual primera vicepresidente regional de Renovación Nacional, he podido observar la solicitud de decenas de personas que, inspirados por el sentido que él le dio al servicio público, han pedido sumarse a nuestras filas, porque han ido comprendiendo que esta nueva centro derecha es dialogante, es social, está altamente comprometida con la mejora de las necesidades que enfrentan los chilenos y por, sobre todo, defiende la libertad.
Finalmente, me quedo con las palabras que durante sus últimos años, el presidente nos compartió, primero que “el tiempo nos dará la razón”, algo que día a día podemos constatar, no sólo por la coyuntura, sino que también porque muchos hoy nos están volviendo a confiar el futuro con mucha fuerza; y también que él se despidió con “la satisfacción del deber cumplido”, lo que hemos comprobado en las múltiples muestras de cariño que se nos han expresado en las últimas semanas, y con evidente afecto, en la misa que convocamos en su nombre, a propósito de su partida.
El legado del presidente Sebastián Piñera debe guiarnos hoy con más claridad y empuje que nunca. El diálogo, la eficiencia y la eficacia, el llevar los sueños de la comunidad a su concreción con celeridad y responsabilidad, debe motivarnos cada día a ejercer con valentía, amor por el prójimo y por nuestro país, el auténtico servicio público.